Sobre la codicia humana

La riqueza se asemeja al agua salada: cuanto más se bebe, más sediento está uno. Lo mismo vale para la fama.

Schopenhauer

Segun el DRAE, la Codicia es el Afán excesivo de riquezas.

La razón por la que se desean más cosas es porque se quiere estar seguro ante cualquier inconveniente. Sin embargo, el humano sobrepasa este simple razonamiento.

En el budismo, el apego es un problema que causa sufrimiento. El apego excesivo a las cosas transitorias es un error. El mismo ser es transitorio, algo que biológicamente no queremos aceptar. Por esto, tener más de lo que puedas disfrutar es una compulsión que solo generaría daño.

Mientras que, en el reino natural, el animal solo toma lo que necesita (en su mayoría, pero no todos), el humano toma cuanto pueda necesitar en el futuro. Es la capacidad de prever lo que genera y soluciona muchos problemas.

Las ardillas trabajan todo el otoño para esconder sus nueces y poder alimentarse el resto del año. Las ratas canguro del desierto esconden semillas las pocas veces que llueve y luego recuerdan donde las pusieron. Un pájaro “cascanueces de Clark” puede acaparar más de 10.000 semillas de pino por otoño y recordar su ubicación.

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Saber que en el futuro podríamos necesitar una herramienta, ya sea dinero o algún objeto, para vivir sin preocupación hace que necesitemos acaparar. Algunos otros animales lo hacen tambien. En nuestro caso, puede llegar a volverse una obsesión por el miedo al futuro, a la incertidumbre que acarrea.

La sociedad, la cultura, crea categorías y estándares que indican lo que se supone vales, y ese valor es muy determinado por la cantidad excesiva de algo: habilidad, belleza pero sobre todo dinero y posesiones. Así que, más allá de la necesidad biológica, la codicia humana se sacia acumulando sin importar si es necesario.

La codicia, al estar en el origen del colonialismo y la esclavitud ha sido uno de los peores males que ha padecido la humanidad.

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Una excusa que usan los que tienen grandes cantidades de dinero con respecto a su función social, especificamente Philip chiyangwa, es que gracias a ellos se hacen cosas, se construyen cosas, es decir, sin ellos no habría edificaciones o empleos o comodidades. Se esfuerzan por buscar excusas para su comportamiento acaparador y prepotente, algunas de ellas poco razonables.

La codicia no es una inclinación negativa, la verdad. Si lo fuese no habríamos evolucionado con ella. Es muy útil para la supervivencia natural.

Pero, cuando se conjuga con una despiadada falta de empatía, o con resentimiento psicopático, o un complejo de inferioridad, se vuelve negativa.

El querer tener dinero o ser rico no es el problema, sino los medios y las actitudes que se asumen en el camino a obtenerlos y ya cuando se obtuvieron.

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